Caso: Me despidieron y no sé que quiero hacer

Esta persona, cercana a los 50 años, fue un profesional muy exitoso en su rubro, con un fuerte sesgo comercial y creativo. No se esperaba que lo despidieran ya que los números de la empresa que dirigía eran muy exitosos y todo parecía marcar bien… hasta que le pidieron dejar la empresa.
Cuando nos reunimos por primera vez, me dijo “no sé que quiero hacer”.

Tuvimos 4 encuentros en los que:

1 | Utilizamos la herramienta MBTI para comprender sus preferencias de personalidad.

2 | Con el apoyo del Business Model Canvas, pudimos comprender, utilizando el modelo de negocios de la empresa a la que ya no pertenecía, qué sabía y que le gustaba hacer. Una especie de “as is” del trabajo profesional que realizaba para obtener su sustento.

3 | Realizamos un ejercicio visual, para comprender cuan balanceado estaba su “work-life balance”.

4 | Por medio de un ejercicio de roles múltiples, pudimos identificar que debería hacer esta persona para ser feliz en su próximo trabajo.

5 | Utilizamos la herramienta Career Sweet Spot para saber dónde debería esta persona enfocar su nueva carrera.

6| Realizamos un segundo ejercicio de personalidad, para saber el mix Emprendedor, Social, Artístico, Convencional, Realista e Investigador de mi coachee.

7 | Realizamos una serie de actividades para identificar el Propósito en la vida de esta persona. El primero fue “Si fueras la tapa de la revista Fast Company, por qué te entrevistarían? El segundo ejercicio fue contestar una serie de preguntas para profundizar los conceptos. El tercero fue leer en perspectiva todo el trabajo realizado para identificar los 3 verbos más resonantes  con su personalidad.

8 | Para cada uno de los tres verbos que identifican el Propósito, pudimos identificar con que personas o grupos aplicar dichos verbos y las actividades que apoyan los verbos.

9 | Dibujamos el nuevo modelo de negocios, a partir del nuevo propósito.

El cambio se puede realizar en cualquier momento de la vida. Quizás no se sencillo hacerlo, pero reinventarse, vale la pena.